Un consorcio
formado por la petrolera noruega Equinor, la hispano-china Repsol Sinopec y la
brasileña Petrobras presentó los planes de comercialización para dos campos de
gas en el litoral brasileño, informó este jueves la compañía operadora.
Las
Declaraciones de Comercialización, que garantizan las condiciones comerciales
del proyecto para iniciar la producción, y los Planes de Desarrollo fueron
entregados a la Agencia Nacional de Petróleo, Gas Natural y Biocombustibles
(ANP, regulador).
Los dos
campos integran la concesión BM-C-33, en la Cuenca de Campos, en un consorcio
en el que el grupo noruego es operador con una participación del 35 %, la misma
que Repsol Sinopec y un 30 % para la petrolera brasileña, detalló Equinor en un
comunicado.
La concesión
está situada unos 200 kilómetros de la litoral de Río de Janeiro, con una
profundidad marina de 2.900 metros y el área contempla volúmenes de gas natural
y petróleo condensado superiores a 1.000 millones de barriles equivalentes de
petróleo.
Los
yacimientos en los campos de Raia Manta y Raia Pintada, nombres que deben ser
confirmados por la ANP, “tienen capacidad para satisfacer el 15% de la demanda
total de gas de Brasil cuando estén en producción”, declaró la presidenta de
Equinor, Veronica Coelho.
El modelo
elegido para el proyecto será el de una unidad flotante de producción,
almacenamiento y andanada capaz de procesar gas y petróleo condensado con una
capacidad de producción de 16 millones de metros cúbicos de gas al día,
comunicó Equinor.
El
desarrollo y la explotación de los yacimientos, descubiertos por Repsol Sinopec
en 2010, tienen el potencial de generar hasta 50.000 empleos y una inversión
total de 9.000 millones de dólares.
En su “contribución
a la seguridad energética y al desarrollo económico del país”, los proyectos
serán los primeros de Brasil en tratar gas marino y conectarlo a la red
nacional con un gasoducto en alta mar sin necesidad de procesamiento adicional
en tierra.
EFE
Montevideo Portal