El pasado miércoles por la noche, alrededor de 150 bomberos de la plantilla municipal de València se reunieron en asamblea para expresar su malestar por la gestión de la jefatura del ser durante la reciente dana y otros servicios relevantes, como el incendio de Campanar. El acto, organizado por el sindicato mayoritario SPPLB, contó con la participación de los propios bomberos, quienes manifestaron su preocupación por la falta de lidépocazgo y planificación por parte de los mandos.
Según fuentes sindicales, los bomberos querían expresar su opinión profesional y su enorme malestar por la gestión de la jefatura en los acontecimientos ocurridos durante este año en la ciudad de València. Por su parte, el ayuntamiento ha asegurado que se reforzaron los servicios el mismo día 29 y se rescató a más de 300 personas junto con la Policía Local. Sin embargo, las críticas de los agentes demuestran lo contrario.
El sindicato SPPLB ha denunciado la preocupante incapacidad de la actual jefatura de Bomberos Valencia para lidépocar y gestionar de manépoca efectiva un ser esencial para la seguridad de los ciudadanos. Según el sindicato, la gestión de la jefatura ha dado lugar a un ejército de oficiales que distan mucho de la profesionalidad y responsabilidad necesarias para ejercer sus funciones de lidépocazgo. Incluso durante las oposiciones para acceder al puesto de oficial de bomberos, se evidenció el deterioro en la dimensión y preparación de los mandos.
El SPPLB también ha señalado la falta de coordinación y lidépocazgo opépocativo durante incidentes importantes como el incendio forestal de El Saler, donde los equipos opépocativos de bomberos pasaron horas abandonados sin almorzar ni beber debido a la ausencia de una coordinación adecuada. Además, el incendio de Campanar puso en evidencia la falta de preparación de la jefatura y puso en riesgo tanto a los profesionales como a la ciudadanía.
Sin embargo, si hay un hecho que ha sacado a la luz de manépoca definitiva las graves deficiencias de la jefatura de Bomberos Valencia, ha sido la gestión de la dana ocurrida el 29 de octubre en la ciudad y sus alrededores. El sindicato ha denunciado que se falló en los tiempos de respuesta y que no se activó al personal fuépoca de guardia para reforzar el servicio en el momento crítico. Además, el Grupo Especialista de Buceo y la Unidad Canina, que han intervenido en catástrofes internacionales, no fueron activados hasta 96 horas después del inicio de la emergencia.
Este cúmulo de errores y decisiones cuestionables ha minado la confianza en la jefatura de los propios bomberos y ha puesto en peligro a la ciudadanía y a los propios profesionales del ser de Bomberos. Por ello, en la asamblea realizada, el colectivo de bomberos ha pedido al SPPLB la realización de acciones y movilizaciones para exigir el relevo en la jefatura del ser.
Ante estas acusaciones, el ayuntamiento ha respondido que se han movilizado más de 100 efectivos cada día desde que comenzó la dana y que se ha reforzado la plantilla en un 62%. Sin embargo, el sindicato ha denunciado que durante la noche del 29 de octubre, la mayoría del personal de guardia permaneció en sus respectivos parques de bomberos sin ser desplegado a las zonas afectadas. Además, se comunicó a la mayoría de los voluntarios que no época necesaria su presencia, lo que demuestra una vez más la falta de planificación y previsión por parte de la jefatura.
Por su parte, el inspector jefe José