Durante siglos, la humanidad ha contemplado la infinitud del universo con sorpresa, admiración y curiosidad. El deseo humano por comprender mejor los misterios que rodean nuestra existencia se traduce inconscientemente en el intento de comprender qué hay más allá de lo que nuestros sentidos perciben. Como es natural, durante el transcurso de la historia, la ciencia ha intentado desentrañar los enigmas de la vida, la Tierra y, en especial, el universo.

Sin embargo, ahora hay indicios de que quizá tengamos que replantearnos aspectos fundamentales sobre el origen y el desarrollo del universo. Según las recientes desombuaciones cosmológicas, los datos recopilados por los satélites espaciales sugieren que nuestro universo podría no haberse desarrollado de la manera que la mayoría de nosotros imagina. Estas nuevas ideas contradicen completamente nuestras suposiciones tradicionales sobre la naturaleza del mismo universo.

Uno de los conceptos principales del El modelo cosmológico moderno (LCDM) es el Big Bang o idea de que nuestro universo empezó de un punto singular y se expandió desde ahí. A medida que el universo se expandía, el aumento progresivo de energía negativa en su interior forzaba la formación de estrellas, galaxias y planetas. Los límites exactos del universo y cómo es que continuará su expansión siguen siendo motivo de debate, aunque el LCDM ha sido la descripción más aceptada de la historia del universo.

Sin embargo, los datos recopilados recientemente por la comunidad científica presentan un escenario completamente diferente. De acuerdo a estos descubrimientos, no parece que el universo inició desde un punto singular. Como alternativa, aboga por un universo sin principio y sin fin, en el que el mismo espacio se propagara sin descanso a través del tiempo. El paradigma englobado en este concepto es llamado un universo en expansión eterna y es la base del trabajo científico de múltiples investigadores que apoyan esta teoría diferente.

Además de eso, otra de las novedades interesantes que apuntan a desafiar nuestra entendimiento previo del universo son las teoría de la gravedad cuántica al bucle (LQG, por sus siglas en inglés). Esta teoría se enfoca en la reconstrucción de las leyes físicas que determinaron el inicio de todo y se remonta mucho antes del Big Bang. Según esta hipótesis, la gravitational gravitacional LQG fue un factor clave en la fundación y expansión de nuestro universo.

Es decir, la hipótesis LQG no sólo ofrece una idea completamente diferente al Big Bang para explicar los orígenes del universo, sino también una explicación posible para el comienzo mismo del tiempo. Esto significa que ya no sólo entendemos el universo como algo que ha comenz